viernes, 25 de agosto de 2023

LA DESNUTRICION DE NUESTRAS MADRES GESTANTES

 

La desnutrición de la madre gestante no solo afecta el crecimiento del feto sino lo condena a irreversibles defectos genéticos y a un permanente subdesarrollo encefálico. En otras palabras, en el Perú, una madre gestante desnutrida produce taras incurables en los genes y el cerebro del hijo que va a procrear.

Información reciente de connotados científicos que han estudiado la Malnutrición Materno-Fetal en poblaciones de países emergentes, ha demostrado claramente cómo evitar esta tragedia.

Con el invalorable aporte del pediatra Luis Caravedo Reyes, decano de Cayetano Heredia entre 1990 y 2002, y de la nutricionista María Luisa Figueroa, pudimos acceder a una abundante literatura internacional que sustentó nuestra publicación en la Revista de la Universidad Cayetano Heredia en Junio 2021 titulada “Malnutrición Materno-Fetal: Revisión de la bibliografía internacional y la urgencia de estudios, prevención e intervención en el Perú”.

Es obvio que los problemas que afectan al común de nuestros ciudadanos, así como la vorágine de sus actividades, obligaciones y responsabilidades, los eximen de detenerse, aunque sea por un generoso instante, a considerar un tema que creemos de suma importancia y actualidad. Cada día, en el silencio de lo que no es noticia, nacen niños peruanos con defectos genéticos y neurológicos. Como es característico, el problema es de larga data, nadie se preocupó de prevenirlo y menos se pensó en medir el cociente intelectual de los que cumplieron 8 y 16 años de edad.

El Perú necesita que paremos unos minutos y tal vez apreciemos que para mejorar hay que romper un círculo vicioso que, por ser común, nadie se pone a pensar en ello y además, por ser costoso y requerir una o dos generaciones, proponerlo es exponerse al rechazo y a ser considerado como otro discípulo de Tomás Moro.

Sin embargo, ¿alguien ha pensado cuándo se origina el poder económico, la ausencia de corrupción y la felicidad ciudadana de los países de primer mundo? ¿Por qué no sufren de una mala educación, pobre salud, corrupción y arcaica justicia? ¿Sus instituciones vienen por generación espontánea o son los ciudadanos los que las gestan con dedicación y esfuerzo? Con todo respeto, la respuesta es una verdad de Perogrullo: Se origina en el nacimiento del ser humano, específicamente, en el momento de la procreación. Siempre y cuando la madre gestante fuese nutrida y cuidada con esmero.

Nuestra propuesta ha sido presentada en diciembre del 2022. Para prevenir la Malnutrición Materno-Fetal en el país es fundamental la organización de un proyecto piloto en 4 distritos de la ciudad de Lima. La metodología será similar a la publicada internacionalmente durante más de una década. El trabajo para el proyecto piloto en nuestro medio es absolutamente realizable. Consideramos que la Alcaldía Metropolitana de Lima puede ser la institución para iniciar el proyecto, ya que sus Hospitales de la Seguridad se ocuparían de las evaluaciones y seguimiento.

Seis a doce meses después, el proyecto piloto daría lugar a la creación de una   nueva institución que se ocupe de la labor a nivel nacional. Es aquí donde nace el Instituto de Prevención de la Malnutrición Materno-Fetal. Como esta campaña nacional requiere presupuesto para una a dos generaciones, no puede estar sujeta a los vaivenes de la política e intereses subalternos. Tiene que ser autónoma del Gobierno, con un Directorio ad-honorem, empleados altamente técnicos y escogidos por riguroso concurso. Dicha institución estará sometida a estrictas auditorías internacionales. La metodología llevada a cabo durante el proyecto piloto, luego de científico seguimiento, habrá demostrado su eficiencia y podrá continuar con los ajustes necesarios para expandir su beneficio a todo el país.

Si bien aún no hemos logrado el compromiso de la Municipalidad Metropolitana del Lima, esperamos el indispensable impulso político que lo concrete. El proyecto piloto es perfectamente posible. La propuesta de extender la prevención a todo el país puede sonar tan increíble como la redondez de la tierra ocho siglos atrás.

A los incrédulos, cito a Pericles: “Si Atenas te parece grande, considera entonces que sus glorias fueron alcanzadas por hombres valientes y por hombres que aprendieron sus deberes”. Si bien estamos algo lejos de alcanzar esta inmortal admonición, me pongo a pensar en lo que siempre aconsejo a cuanto joven me quiere escuchar: “Nunca pienses contentarte con poco. Atrévete a fijarte en vallas altas en la vida. Te sorprenderá gratamente cuando te corone el éxito”.